Fue

VOTO: Por amor a Jesús, haré siempre lo mejor”
LEY: Jesús me ayuda a:
Ser obediente: Obedeceré las Leyes de Dios y contento haré lo que
mis padres y maestros me pidan. Obedeceré las leyes de mi
país.
Ser puro: Mi cuerpo es el templo de Dios, por lo tanto quiero
mantenerlo limpio. No maldeciré, ni fumaré, ni beberé alcohol,
ni usaré drogas, o cualquier otra cosa que no agrada a Dios.
Ser leal: Siempre diré la verdad y nunca trataré de engañar,
aunque tenga problemas por ello.
Ser amable: Buscaré formas de hacer felices a otros. Nunca dañaré
a una persona o animal intencionalmente. Además, compartiré
mis juguetes.
Ser respetuoso: Tendré respeto hacia aquellos que Dios ha puesto en
posición de autoridad sobre mí (como padres y maestros) y
hacia aquellos que son menores y más débiles que yo (como
hermanos y hermanas). Cuidaré celosamente la propiedad
ajena, aun cuando se trate de algo tan pequeño como un lápiz.
Ser atento: Escucharé cuando alguien me hable en la casa, en la
escuela y en la iglesia. Especialmente escucharé a Dios, cuando
me diga lo que debo hacer.
Ser ayudador: Buscaré maneras de ayudar, y no esperaré a que se me
pida hacerlo. Puedo ayudar en casa, a profesores y amigos en la
escuela, y a otras personas afuera. Hasta puedo ayudar a Dios.
Ser alegre: No murmuraré ni me quejaré cuando no se haga como
yo digo o cuando tenga algo que hacer. Recordaré que Dios
me hizo; ¡Dios no hace cosas inservibles; por lo tanto, yo no soy
inservible! Saber eso, me hace feliz.
Ser considerado: Cultivaré el hábito de la cortesía, tanto en palabras
como en acción. Buscaré formas de ser bueno con la gente. No
seré rudo ni precipitado.
Ser reverente: Escucharé reverentemente a Dios, su Palabra y a sus
mensajeros. Cuidaré muy bien mi Biblia y las propiedades de la
iglesia. Nunca me burlaré de las cosas sagradas.